EL VIAJE DE MIS SUEÑOS... en Tailandia, con Peace Revolution.
De vez en cuando la vida te da “regalitos” y este para
mí ha sido un tesoro…
Llevaba mucho tiempo
buscando becas, concursos, ayudas… un camino, una señal que me dijera “sí, es
por aquí, no te has equivocado”. He intentado de mil maneras salir de España
porque aquí me parecía imposible mover mi pintura… He luchado, he arriesgado, me
he desesperado… Pero supongo que, a pesar de todos los “Noes” recibidos, nunca
he perdido la esperanza.
El pasado Diciembre me comunicaron que había sido
elegida para representar a España en el I Retiro de Meditación Artística
organizado por la ONG Peace Revolution,
ésta es una iniciativa
internacional no religiosa, que busca
generar a futuros líderes de la Paz. Su principio fundamental es la idea de que
la Paz mundial es posible a través de la Paz interior.
Nuestra misión: relajarnos, aprender a disfrutar
del momento presente y comprobar los efectos
positivos de la meditación en el desarrollo creativo y artístico.
¡Qué paisajes, qué
árboles, qué de sonidos de animales se escuchaban por las noches! Nunca vi las
estrellas como se veían desde allí.
Entre todos creamos una colección artística que
fue expuesta en el mes de Febrero en Bangkok: “Samadhi -
Santi Collection of Contemporary Art”
(Samadhi=Meditación. Santi=Paz).
Personalmente
quise aprovechar la ocasión, para hacer un pequeño homenaje a un hombre que
para mí representa todos los valores de los que allí hablábamos: tolerancia, respeto,
generosidad, libertad, y lo más importante: AMOR. La obra se titula “Love”, es un retrato a carboncillo y
lápiz Conté de Nelson Mandela, y va acompañada
del siguiente texto:
“No one is born hating another person because of color
of his skin, or his background, or his religion. People learn to hate, and if they can
learn to hate, they can be taught to LOVE,
for love comes more naturally to the human heart
than its opposite."
Nelson Mandela
Cuando me pongo a pensar en qué ha supuesto para mí esta
experiencia, supongo que me invade una sonrisa…algo eterno, mágico, muy
valioso, me llenó por dentro…
Han pasado cuatro meses desde que llegué de esta
aventura, puedo decir que ha sido un sueño! Traje la maleta llenita de cosas buenas, de lecciones de Amor.
Los monjes nos enseñaron
la importancia de ponernos en el lugar
del otro (“putting yourself in other’s shoes”); de ver las cosas buenas en uno mismo y en los demás; de que la
preocupación no sirve absolutamente de nada, hay que dedicarse a ser feliz (“don´t worry, be happy”, “hakuna matata”
nos repetían… nunca imaginé unos monjes tan risueños!); de vivir, disfrutar y
saborear cada instante del momento
presente, es un regalo que no volverá; de lo importante que es cultivar la paciencia, mantener la mente en calma, estar tranquilo (estar
“sabai”); de ser amable y respetuoso,
de sonreir (cuánto cambian las cosas
cuando uno decide hacerlo!); de perdonar
y dejar ir, porque sino no eres
libre; de la importancia de
agradecer… de amarse a uno mismo y
desprender amor… porque lo que das, recibes.
Pequeñas perlitas de sabiduría que ojalá nos enseñaran
desde niños…
La meditación ayuda a entender todo esto, a cultivar la paz interior y
los buenos sentimientos… Te permite mantener la mente en calma, dejar de lado
por unos instantes todos los problemas, preocupaciones, ansiedades y estrés de
la vida diaria, para relajarte, mirar
dentro de tí mismo y ver lo bueno, observar las cosas desde otro punto de
vista, más calmado, consciente y positivo…“Nuestra
felicidad depende del modo en que nosotros pensamos”.
Todo ello siempre permanecerá en mí. Regreso a casa
con la esperanza y la fe de que para poder cambiar el
mundo, necesitamos comenzar cambiándonos a nosotros mismos... Y con la convicción de
que el Amor es el sentimiento más
poderoso que existe y, por tanto, la
mejor herramienta de las que disponemos!
Sólo me queda dar GRACIAS… de corazón!